Uno de los géneros más conocidos, incluso si no te gusta la cosmética natural, es el género Citrus.
Naranjas, mandarinas, limones…. excelentes frutas, con excelentes propiedades tanto en alimentación, como en cosmética.
Se han formulado diferentes hipótesis acerca del origen de los cítricos. La hipótesis más aceptada es que las especies de cítricos y géneros afines son originarios de las regiones tropicales y subtropicales del Sureste Asiático y del Archipiélago Malayo, desde donde se distribuyeron a otros continentes donde se han cultivado.
¿Quizás pensabas que eran originarias de Valencia (España)? Allí se cultivan excelentes naranjas, pero su origen se sitúa en Asia.
La taxonomía de los cítricos es muy compleja y no hay un acuerdo unánime entre los botánicos. Así que puedes encontrar bastantes diferencias en la denominación según la fuente que consultes. Además, la mayoría de los cítricos son híbridos, es decir, proceden del cruce entre 2 especies, así que esto complica aún más las cosas.
Los aceites esenciales de este género son ampliamente utilizados por su fresco aroma y seguramente sabéis que hay que tener en cuenta 2 factores importantes si usas estos aceites esenciales:
Fototoxicidad y método de extracción.
Lo más frecuente es que los aceites esenciales de este género se obtengan por presión de la cáscara, y son fototóxicos.
Los cítricos son aceites esenciales que se relacionan con la fototoxicidad, son fotosensibilizantes, La fotosensibilidad de estos aceites esenciales es debida principalmente a la presencia de furanocumarinas.
Te recuerdo que: «La fotosensibilidad es una respuesta exagerada o anormal de la piel a la radiación, puede ser proveniente del sol o de una fuente artificial».
Pero… A día de hoy también podemos encontrar aceites esenciales de este género y que no son fototóxicos, son los que se obtienen por destilación.
Por lo tanto, el método de extracción es fundamental, en este género nos encontramos 2 métodos: presión de la cáscara y destilación.
Y un tercer punto importante en este género es la parte de la planta utilizada.
Puede utilizarse la cáscara o las hojas. Evidentemente los que se relacionan con la fototoxicidad son los que se obtienen de la cáscara, no así los que se obtienen de las hojas, que son los que se denominan «petit grain».
Aunque según el país de origen algunos petit grain tienen en su composición una molécula: metil antranilato que si se le atribuye fototoxicidad.
El universo de los aceites esenciales es complejo, úsalos con prudencia o asesórate por un profesional.
Espero que esta breve descripción te ayude a entender mejor este género y a seleccionar mejor cuando los usas en cosmética, si te gusta el aroma a cítricos, lo mejor es usar o los «petit grain» o buscar los que se obtienen por destilación.
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